14 febrero 2008

San Valentín, latigazos de amor.

Hoy toca. Me veo obligado a hablar del amor. ¿Estamos obligados a amar? ¿Sentirás eternamente esa especie de cosquilleo e imbecilidad? ¿Acaso siempre vamos a sentir eso? Olvídate. Olvida la palabra AMOR tal y como la concibes porque ese no existe. El amor lo llevas dentro, y no se destina a una única persona elegida por circunstancias espacio-temporales. Es mucho más grande y abarca mucho más. Reparte amor, porque es la única manera de que lo recibas. La felicidad será la cosecha de tu plantación. No es un corazón rojo, ni unas palabras bonitas. El amor no es un regalo de hoy ni un "te quiero" enlatado. No es un pantalón del Bershka ni una entrada para el teatro. El amor no es una ocasión, es el reflejo del tuyo propio. Quiere, ama, siente, aprecia... y serás querido, amado, sentido, apreciado. Respeta. Aprende. Construye. Todo es posible si lo haces con amor. Es el camino y el ingrediente principal de la felicidad. Como todo camino, encontará dificultades. Pero amar es el fin, la forma y el mismo camino en sí.