25 enero 2021

Tercera Ola.

Hola, hola, hola. ¿Cómo lo llevas? Supongo que harto. Si eres negacionista, harto de borregos y si ves mucho la tele harto de irresponsables. Yo también. Estoy harto y por eso he tardado tanto en escribir por aquí. El plan es el plan y la agenda la están llevando a rajatabla. Tal como leísteis en mis anteriores posts todo el cuento sigue evolucionando hacia una vacunación obligatoria. Y esa vacunación lleva asociado un registro, y ese registro es por lo que está ocurriendo todo esto. Esto no es nuevo, y los que estamos en esto de la contrainformación, a lo que llaman ahora intentando despreciarnos 'conspiranoia', son muchos años que sabemos que ese era el plan. Se llama ID2020 y va de la mano, como no, de Bill Gates y Rockefeller. Si quieres, busca información, ya sabes que a mi me gusta dar qué pensar. Pero estás a un click de tener más información si la quieres.

No, no os voy a dar mucho el coñazo hoy ni voy a alargar demasiado este post, pero quiero copiar aquí un hilo de un tuitero que me ha parecido un buen resumen de la actualidad. 

@Rolod14

La gran falacia de toda este engaño se basa en el “tú me proteges a mi y yo te protejo a ti”. Se ha hecho creer a la población que el hecho de que una persona no se proteja condiciona al resto a sufrir las consecuencias AUN protegiéndose todos los demás. Hemos convivido toda nuestra vida con personas que no se han vacunado de mil cosas que nosotros sí y viceversa, hemos ido a trabajar con 40 de fiebre y gripe compartiendo transporte público con otros miles de personas, contagiando a compañeros, familiares, amigos y desconocidos. Desde pequeños nos han enseñado que contamos con un maravilloso SISTEMA INMUNOLÓGICO que mantenemos fuerte con una vida sana, ejercicio y buena alimentación, pero del cual no interesa hablar ahora. Han convertido a la sociedad en hipocondríaca a través del MIEDO las 24 horas en los medios de comunicación. Han amenazado a la gente con hacerse a la idea de vivir el resto de su vida en una “nueva normalidad” de aislamiento social, de paranoia colectiva y miedo constante, persiguiendo a aquellos que osen vivir con la normalidad de antes. Han hecho creer a la población que los que no se quieren inyectar una “vacuna” desarrollada en 4 meses harán que esto no acabe nunca y que hay que perseguirles y obligarles o hacer listados con ellos. BARBARIDAD TRAS BARBARIDAD desde todo punto de vista ético y científico.

La única forma de acabar con todo este sinsentido es precisamente aquello que los medios comprados por las farmacéuticas dicen no hacer, que es DESOBEDECER. “No estamos como estamos por culpa de los irresponsables”, otra gran falacia, estamos así por todos los que han obedecido.
 
Si alguien quiere vivir una vida hipocondríaca de miedo constante a agentes patógenos externos puede protegerse con un traje hermético o una bola de plástico que de verdad aísle del exterior, y así pueda vivir tranquila pero NO puede condicionar al resto a vivir de la misma forma arruinándose, deteriorándose psicológica y emocionalmente, distanciándose de su familia y amigos, encerrada en casa dejando de viajar, de abrazar, de besar, de perder todo tipo de contacto humano y, en definitiva, DEJANDO DE VIVIR.